LOS 5 SHEN
En la Medicina China en la que se entiende el organismo como un todo integrado, sin la distinción
radical cuerpo-mente occidental. El cuerpo y la mente tienen una misma naturaleza por lo que
la curación del cuerpo incluye la de la mente y viceversa. Desde esta
concepción, si no se logra una mejoría espiritual y no se cura el mal de la
mente, es imposible curar la enfermedad.
En la
medicina china no se ve a cada órgano interno sólo como una estructura
anatómica y física, sino que poseen un subconsciente o espíritu propio por lo
que establecen conexiones con las emociones , con los tejidos y los
sentidos , con funciones mentales , los
colores, el clima y las estaciones los 5 elementos de la naturaleza. Por tanto estos aspectos energéticos o
psicológicos de órganos deben ser tenidos en cuenta.
El Qi es la
base de todos los procesos psicológicos,
emocionales y mentales. Mientras que en la medicina occidental todos estos procesos se atribuyen al cerebro, en MTC hay una estrecha relación
con los órganos internos. Las emociones afectan al estado de ciertos órganos, y
viceversa, el estado de estos órganos afectará a nuestro estado emocional.
Partiendo de esta base nos adentrarnos en el concepto de “Shen” que nos
ayudará a comprender mejor la relación entre las emociones y las enfermedades.
La traducción del concepto Shen es complicada por la amplitud de
significados que engloba. Se puede traducir como mente, espíritu o consciencia entre
otros. Para simplificar aquí nos referiremos al
Shen como “Espíritu” o “conciencia”. Hay 5 Shen, 5 espíritus asociados a los 5 órganos
principales del organismo, siendo el Shen mismo, el Hun, el Po, el Yi y el
Zhi.
Son los distintos aspectos del mismo espíritu, que aunque se analizan por separado,
forman parte de un mismo organismo como los propios órganos. La salud de
nuestro cuerpo no está separada de nuestra salud psíquica, son independientes y
complementarias. Un desequilibrio en un plano provoca problemas en el otro.
Cada emoción tiene
una representación psíquica que se aloja en un órgano distinto
SHEN en el Corazón, HUN en el Hígado, PO en el Pulmón, YI en el Bazo y ZHI en el Riñón. Estas entidades psicológicas conforman nuestro carácter. Fruto de la interacción con el exterior se producen sentimientos y emociones, que vibran con el órgano con el que tienen relación.
SHEN en el Corazón, HUN en el Hígado, PO en el Pulmón, YI en el Bazo y ZHI en el Riñón. Estas entidades psicológicas conforman nuestro carácter. Fruto de la interacción con el exterior se producen sentimientos y emociones, que vibran con el órgano con el que tienen relación.
SHEN de corazón o mente:
Shen puede traducirse como conciencia que controla el correcto funcionamiento de
nuestras actividades mentales. La mente está estrechamente relacionada con el corazón que es su residencia, y su
estado puede verse a través de los ojos. Su elemento relacionado es el fuego. El Shen es
el director psíquico de la conciencia y encargado de la coherencia y la
inteligencia. Es indispensable para el equilibrio de la razón y las emociones. Es
responsable de muchas actividades mentales diferentes tales como el pensamiento, la memoria, la
conciencia y el conocimiento. También se relaciona
la introspección, la comprensión, la contención de impulsos, la sabiduría o las
ideas.
Es la mente y por tanto el corazón, quien “siente” las emociones, aunque afecten a
más órganos. El Shen contiene todas las otras entidades psíquicas y cada entidad
psicológica es a su vez una emanación del shen.
HUN
El alma etérea que reside en el hígado:
Corresponde
con el elemento madera que está
relacionado con el hígado y la vesícula biliar. En él se alojan las
pulsiones y las pasiones.
Las emociones que repercuten en el
hígado son la rabia, la ira, la frustración. Tiene que ver con el
instinto de conservación, la supervivencia, la extroversión, y la sexualidad
como instinto de reproducción.
Cuando está en equilibrio se traduce en coraje, la planificación de nuestro camino vital y la realización personal.
Cuando está en equilibrio se traduce en coraje, la planificación de nuestro camino vital y la realización personal.
Hun, el alma etérea: Es el alma o espíritu inmortal desde el punto de vista occidental. Al ser etérea no muere con el cuerpo.
PO El alma corpórea que reside en
los pulmones
Corresponde con el elemento metal y los pulmones. La
parte de la conciencia más corporal, determina las acciones y reacciones del
organismo destinadas a escoger, sin que intervenga la mente. Está relacionado con la
introversión y el egocentrismo. El
sentimiento de tristeza puede atacar directamente al Po.
Está relacionado también con la voluntad de vivir, y por tanto con las depresiones.
Po es el alma corpórea, la parte del alma que vive y muere con el cuerpo físico.
Está relacionado también con la voluntad de vivir, y por tanto con las depresiones.
Po es el alma corpórea, la parte del alma que vive y muere con el cuerpo físico.
YI El intelecto que reside en el Bazo: Corresponde con el elemento tierra,
que está relacionado con el órgano del bazo-páncreas y el estómago. El intelecto reside en el bazo y es el responsable del
pensamiento, el estudio, la memorización, y la concentración. Su emoción es el pensamiento meditativo, la
reflexión, que si pierde el control puede convertirse en obsesión y
preocupación.
ZHI La fuerza de
voluntad o que reside en los riñones: Corresponde con
el elemento agua. Es la
voluntad, la fuerza que permite seguir y acabar las tareas en curso. Es la sexualidad, la fuerza, el
poder y la capacidad de reproducción. La tenacidad que en exceso puede volverse
obstinación. Representa
la fuerza de voluntad, el impulso, la determinación y la persecución de metas,
el entusiasmo y la motivación. Tiene que ver con la autoridad y la
autoafirmación. Cuando está en
desequilibrio produce ausencia de cualquier tipo de deseo. La
emoción con la que se relaciona es el miedo.
Antes de
comenzar con la analogía de La Gran Ciudad, cabe
destacar la influencia de la dualidad Yin-Yang que también
se da en
los órganos. Yin y Yang son aspectos que se oponen pero que son a su vez
interdependientes. En general se asocia al Yang la
masculinidad, la actividad, el calor, la claridad ola sequedad y al Yin la
femineidad, la pasividad, el frío, la oscuridad y la humedad. La dualidad
Yin-Yang no es equiparable a la de Bien y Mal occidental, aunque
opuestos, se definen el uno al otro y su interacción debe estar en equilibrio.
La interacción entre Yin y Yang es un proceso en el que el uno genera a su
contrario y el aumento de uno supone la reducción del otro.
En todas las
cosas existe un aspecto Yin y un aspecto Yang que se hallan en un equilibrio
dinámico. Esta dinámica también influye en la función de todos los órganos,
glándulas, tejidos y fluidos vitales del cuerpo. Los órganos vitales también estarán influenciados por esta
dualidad dinámica del Yin y el Yang como veremos a continuación.
El profesor Fernando Lurueña propone una antigua
concepción Taoísta que describe
el organismo como si fuera una gran
ciudad, una gran comunidad donde los
órganos interpretan el papel de personajes que interactúan entre sí, para poder
comprender mejor la relación entre los órganos y los 5 Shen. Podemos encontrar un general que lucha, al
campesino que contribuye con su trabajo o incluso al emperador que rige y
gobierna el centro.
El hígado es el gran
general, que es nuestro ego. Hay una
parte del hígado que es yang, que
representa la acción violenta. La competitividad es propia de un hígado de lucha yang. Cuando
tenemos un hígado que se rinde tenemos
un hígado yang bajo. Muestra un
carácter sumiso, que tolera que lo vapuleen. La otra parte
es el hígado yin, es la parte inteligente. Tiene que ver con reprimir
las emociones o soltarlas. Una parte es la lucha y la otra la inteligencia,
siempre en base a nuestro ego. Todos estos aspectos afectan a nuestra forma de
ser. El hígado alto es propio de los competidores, de quienes quieren ganar.
Dentro del hígado no solo se puede ver lo que falla respecto
a tu actitud, sino que se van a producir una serie de enfermedades, sobre todo
nerviosas (Ictus, nervios, tics). Otra de las enfermedades relacionadas con el
hígado yin es la artrosis.
El bazo es el campesino. Es el que trabaja y
representa la energía física. El bazo yang es la mano de obra. Una persona que no
tenga esa energía, va a ser una persona con fatiga crónica, agotada. En cambio el lado yin viene a ser la
organización en el trabajo.
El bazo es el órgano que se encarga de limpiar los glóbulos
rojos. Una persona con exceso en bazo, es una persona muy escrupulosa muy
meticulosa, tanto con la limpieza de la casa como con la higiene personal. En
cambio una persona con energía baja en el bazo, va a ser una persona poco
aseada. Ni sus glóbulos rojos limpian su
organismo, ni se limpia a sí misma. Las enfermedades relacionadas con el bazo
no son sólo enfermedades de energía física, sino de su factor patógeno.
El factor patógeno
es un elemento que está dentro de la naturaleza que está también dentro de
nosotros. Lo que ocurre en el exterior
va a ocurrir en nosotros mismos. En el bazo/páncreas ese factor patógeno es la
humedad. Aquí vamos a ver problemas de fibromialgia, (aunque está también
relacionado con otros órganos ) de humedad, de flemas, de pesadez en el cuerpo
y dolores musculares.
El factor patógeno en el
hígado es el viento, en el corazón el fuego, calor, en el pulmón la sequedad y
en los riñones el frío.
El pulmón es el tigre, por un lado el pulmón yin es el instinto animal, y el pulmón yang es el estado de contemplación en el que los animales entran en una especie de estado de comunión con el entorno y la naturaleza. El pulmón está relacionado con la comprensión del entorno. Es el órgano que está en
contacto con el exterior, encargado de la comprensión de lo que sucede alrededor y la reacción que tenemos al
respecto. Al inspirar el aire recibimos información del exterior.
El pulmón yang, se
traduce en una persona derrochadora que compra más de lo necesario. En cambio
una persona que no se siente merecedora de lo que tiene, que incluso le cuesta
dar un abrazo, tiene un pulmón yin en deficiencia. La comprensión sería el
pulmón yin donde se pueden apreciar problemas de depresión, ansiedad y estrés.
El pulmón es el que abastece a todo el cuerpo de energía que
viene de la respiración. Si el pulmón no abastece bien a cuerpo, el cuerpo se
viene abajo y todos los demás órganos también. Cuando se recupera el pulmón
recuperamos también esa comprensión del entorno y de la vida.
El corazón es la
comprensión de nuestro interior, donde la parte yin sería el intérprete de lo
que sucede dentro de nuestro cuerpo. Se podría decir que cada órgano tiene un
idioma y el corazón lo traduce para enviarlo al cerebro.
El personaje en el corazón sería el vendedor, porque vende
lo que tenemos en nuestro interior al exterior. Es el que se expresa (relacionado con el habla ,
la capacidad de expresarse, la comunicación)
El corazón yin
interpreta la realidad y el yang le da lugar a esa interpretación, la hace real.
En función de cómo tengas tu realidad, vas a poder mostrarla
al exterior. Cuando alguien ve una realidad externa distinta que no corresponde
con la realidad, es porque su realidad interna está trastocada. Por tanto a
través del corazón se pueden identificar los problemas mentales
La frialdad y la sensibilidad la encontramos también aquí.
Una persona con el corazón yin alto es una persona fría, que no le importa
criticar a la gente. Una persona con corazón yin bajo es una persona
extremadamente sensible.
Riñones.
En el riñón izquierdo están las relaciones con figuras femeninas, el destino, también el árbol genealógico y el ADN, es lo más profundo. Dentro está también la espiritualidad, desde ser un fanático religioso a ser un ateo, etc.
El riñón derecho representa la figura masculina, como puede ser la figura del padre, el camino, la imagen de la familia, la empresa donde se trabaja, la voluntad... Depende de donde sea el trauma, en el yin o en el yang. El yang es siempre más superficial y el yin es mucho más profundo.
El profesor Fernando Lurueña explica:
“ La vida puede ser trauma, la cuestión es aprender de ese trauma o dejar que nos engulla. Somos una eterna mariposa en su capullo que tiene que romper su crisálida. Y al romperse la crisálida vendrá otra. Si nos medicamos no aprendemos, si nos dormimos dentro de esa crisálida habremos pasado planos por esta vida. Es importante pasar a otra crisálida donde vamos a ser cada vez más fuertes, donde cada problema va a ser más mínimo aunque sea más importante, pero estamos aprendiendo de la vida. Estamos aprendiendo de la rueda de la vida, la rueda de Samsara. Cada vez que solucionas un problema se te presentará otro, pero lo vas a superar con éxito porque habrás comprendido la vida.”
Cuando ha fallecido alguien y no somos capaces de superarlo
o aceptarlo, el riñón izquierdo se resiente. Dentro está también el árbol
genealógico y el ADN, es lo más profundo. Dentro está también la
espiritualidad, desde ser un fanático religioso a ser un ateo.
El riñón derecho
representa la figura masculina, la
figura del padre, abuelo o el hijo. Depende de donde sea el trauma, en el yin o
en el yang. El yang es siempre más
superficial y el yin es mucho más profundo.
Finalmente el
emperador es el cerebro que es el que va a coger toda esa información de
los órganos y va intentar gobernar dentro del cuerpo y con quien se va a dar
una lucha. La parte consciente del emperador intenta gobernar mientras que la
parte subconsciente consistiría en dejar
actuar a los órganos por sí mismos. Dentro del cuerpo hay una inteligencia
natural para regenerarse y debemos intentar
dejar que ésta siga su curso y que el cerebro actúe lo menos
posible.
Teniendo en cuenta esta analogía podemos entender mejor la
relación que los órganos tienen entre sí y cómo los traumas emocionales afectan
a distintas partes en función de dicha relación. Para poder corregir los traumas de los
órganos y conseguir que el organismo vuelva a funcionar con normalidad tenemos
la ayuda de una herramienta muy valiosa: la acupuntura.
A través del diagnóstico preciso se puede localizar el
trauma e identificar los patrones que se
repiten en cada enfermedad, para poder así restaurar el equilibrio del cuerpo.
Una vez localizado ese trauma, mediante las diversas
técnicas de acupuntura, se le da una
orden al órgano traumado para que se despierte y se ponga a trabajar. Así puede
empezar a autorregularse todo el organismo. Normalmente esta autorregulación se da por la
noche cuando la frecuencia de las ondas cerebrales es más baja y ese órgano tratado se puede poner a trabajar
sin la interferencia de la mente.
Si ignoramos los mensajes que nos envía nuestro organismo en
forma de síntomas, una simple lumbalgia puede pasar a ser una ciática, o a un
dolor de rodilla, una cefalea… ya que cada vez
se le pueden ir sumando más síntomas.
Ese mensaje desatendido de tu propio cuerpo cada vez va a ir más. Sin
embargo cuando le haces caso a tu propio cuerpo, a tu propio subconsciente, todo vuelve a la
normalidad.